Desde el último blog han pasado muchas cosas. Renunció
el Papa, hubo actos terroristas en Boston, al cardenal de Puerto Rico lo
tienen agarra’o por las pelotas, el crimen no ha parado y hasta Barea se divorció.
Las propuestas para impuestos siguen saliendo (esto no debe sorprender a
nadie), los costos de energía y agua se dispararon, etc., etc. En fin, seguimos
siendo un país mediocre y sin mucho futuro, si alguno.
En
un blog anterior mencioné que nos iban a cobrar hasta por el aire que tuvieran
las gomas de nuestros autos. Claro está que lo dije en un tono sarcástico y
pesimista, pero ésta semana la quijada me llegó al piso. Resulta que un
flamante legislador ha propuesto cobrar un dólar por cada bolsa de supermercado
que uses. Esto para proteger el ambiente. La verdad es que los políticos
piensan que somos idiotas, y no los culpo, porque entre otros, uno de sus
puntos de referencia debe ser el resultado de las pasadas elecciones.
Las
bolsas plásticas si son un problema ambiental, no hay duda. Pero si de verdad ese genio quisiera
resolverlo, lo que tiene que presentar
es un proyecto para eliminarlas y ya. Este tipo lo que hace es agarrando un
tema sensitivo y simpático para empujarnos ooooootro impuesto. Y hay quienes le creyeron el cuento.
Yo no se lo creo, pero le voy a ir enviando un pesito
por tener una bolsa permanente, aunque no sea de plástico.