miércoles, 7 de noviembre de 2012

El DeLorean


Ganó el PPD. Y como. La gobernación estuvo cerrada, pero el resto lo ganaron cómodo. ¡Hasta San Juan! ¡Y con Carmen Yulín! ¡¿WTF?! Esa sí que fue la sorpresa. Los sanjuaneros sabrán porque lo hicieron, o quizás no. Pero ganó con los votos, y eso se respeta.

                Volvamos a la gobernación. Alejandro García ganó. Fue bastante cerrado pero ganó. En eso la encuesta de El Nuevo Día la pegó. Bueno, pues ahora le tocará implantar su plataforma de gobierno y someterse al escrutinio de la nueva oposición (el PNP) y de una minoría de la prensa. Pero; ¿Qué podemos esperar del 2013 al 2016? Veamos:

- Con un comisionado residente PNP, lo echarán a un lado y crearán una oficina como lo hicieron con Bathia, para hacer el mismo trabajo, y de viaje contratar uno que otro asesor para ir guardando un chenchito para la campaña del 2016.

- Con el “nuevo senado” en los que se destacan Bathia, Angel Rosa, Fas Alzamora, Aníbal José Torres, Dalmau, Suarez y Pereira, podemos esperar legislación de “vanguardia”. Si Pepe. Sólo hay que mirar su hoja de servicio y la profundidad de lo que ha sido su discurso.

- Con una “nueva cámara” con Perelló, Vega Ramos y Charlie Hernández, pues lo mismo. Debate de profundidad.

- Eliminación de la reforma contributiva. En el pasado ocurrió cuando Sila eliminó la de Rosselló.

- El gobierno se llenará otra vez de empleados. Por lo tanto, el déficit operacional que Fortuño bajó de $3, 300, 000,000 a $300, 000,000 subirá otra vez, y la deuda pública se duplicará. Actualmente está en $69, 000,000.

- No esperen obra de infraestructura.

- No esperen modernización en nada. El PPD se destaca como un partido retrógrado.

- No esperen que se empuje en nada la decisión de la consulta de estatus.

- Le darán hasta las nalgas a los sindicatos a nuestro costo.

- Los pagos a los suplidores volveran a tardar tiempo inimaginable, subiendo los costos.

                Quería que ganara Fortuño (no se nota, verdad). Y les explico por qué. Porque es un gerente. Y la diferencia de un gerente y un político es que el político hace y dice cualquier cosa por ganar, y el gerente hace lo necesario para que su organización sea eficiente, dejando la simpatía a un lado. Por años aquí se habló del gigantismo gubernamental, pero nadie se atrevió a enfrentarlo, Fortuño sí. Por años se habló de que había que empezar a moverse para reducir la dependencia del petróleo, pero nadie hizo nada, Fortuño sí. Todos han prometido reformas contributivas, sólo Rosselló y Fortuño las implantaron. Y sobre todo, porque soy un gerente, y he estado en situaciones en las que he tomado decisiones poco simpáticas.

                A los amigos del PPD sólo les pido que trabajen limpia y responsablemente por el pueblo que los eligió, y por el que no votó por ustedes también. Trabajen por el país.

                A mis amigos del PNP les pido que ayuden al nuevo gobernador a hacer un buen trabajo. Si presenta ideas buenas, respáldenlo. No hagan lo mismo que le criticaron a el durante éstos cuatro años. Trabajen por el país también.

                A mis amigos del PIP, PPT, MUS y PPR les pido que se recojan a buen vivir. Vuelvan al partido popular y no jodan más. Sus caprichos nos hacen perder tiempo y dinero tanto a ustedes como a nosotros. Ya mañana estarán en los centros comerciales, playas, festivales, bautizos de muñecas, velorios, divorcios y bodas con una mesa buscando endosos para reinscribirse. Amigos, no les cojan pena y le den el endoso para luego cuando estén en la caseta votar por el PPD o el PNP. Repito, eso cuesta tiempo, dinero y crea falsas expectativas.

                Y a todos los puertorriqueños les pido que respeten la democracia, ayuden a los nuevos incumbentes en las iniciativas que sean de provecho para todos (si presentan alguna), y sigan trabajando por un mejor país.

                Para terminar, recuerdo las películas Back To The Future, en las que había un auto DeLorean en el que Marthy se subía y tenía la opción de viajar al pasado o al futuro. Ayer Puerto Rico se montó en ese auto. ¿Viajaremos al futuro a volveremos al pasado? Yo espero que sea al futuro. De todas maneras, dentro de cuatro años sabremos a donde llegamos. Esa es la pregunta.

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